jueves, 15 de mayo de 2008

353 Lesbrant

(Aviso: Este historia la voy a contar cambiando seguidamente de personajes, primero Harry James Potter y luego Richard Simon Sydney)

Mientras dos personas iban caminando por la noche desierta en la calle Lesbrant, alguien más los estaba siguiendo. Ya se habían dado cuenta de su presencia, porque era inevitable para dos magos en esa oscura noche no ser seguidos. Sin embargo, también sabían que la persona que los seguía no era alguien que quería lastimarlos sino alguien que estaba allí por curiosidad.

- Cada uno tiene su método para actuar – comentaba el primer mago- Kingsley, pues, es extraña su forma y única. No podemos hacer nada ni quejarnos de nada, además de que Lord Voldemort ya ha muerto, y que el allá asumido como ministro nos simplifica mucho mas las cosas a nosotros ya que varios mortifagos se fueron del pueblo huyendo despavoridos.

El hecho de que ya nombraran a Lord Voldemort por su nombre, era porque el sistema de los mortifagos para capturar a los magos, era usado reversiblemente haciendo que estos cayeran allí, asi podrían ser capturados. Igualmente, ninguno de ellos aparecía por temor.

- Si, pero su manera de manejarnos es un poco floja. Nos mando a buscar a todos los mortifagos en este país, pero ninguno de nosotros fuimos a buscar en otros países donde probablemente estén escondidos allí.- respondió el segundo mago.

- ¿Quien dijo que no?- contestó el primero – Mandaron escuadrones especiales hacia Albania y los países cerca de ahí que eran donde posiblemente se encontraban, Art.

El chico escucho con atención el nombre Art, y lo anoto en su pequeño block que llevaba guardado en su mochila por si acaso.

- ¿Cómo no pude enterar de eso? – preguntó Art.

- La operación fue en secreto para que nadie se enterase, y por lo que veo dio bastante resultado ya que aurores tan entrenados como yo sabemos de su existencia-.

“Aurores, que palabras tan extrañas” pensó el niño, aunque también la anoto en su block.

- Bah, no vayas alardeando, si tu seguramente te enteraste por tu noviecita que es mas capaz de hacer un hechizo desmemorizante que tu-

“Por dios, que palabras mas extrañas iban diciendo estos dos. Dudo mucho que no se hayan drogado o tomado varias copas”.

- Lo admito- reconocía el primero- pero ella es muy poderosa y fue con los escuadrones. Además, tuve mejores notas que tu en Hogwarts.

- Si, porque te copiaste de Billy Madison, ese si que era un traga, como lo llaman los muggles.

Los dos estallaron de risa. “¿Qué les pasaba a estos dos tipos? ¿Qué era eso de Hogwarts y qué significaba muggles? Lo mejor era irse rápido de ahí.
- Me he enterado que Potter se iría del colegio para representarse como auror- comentó asi por pasar el primer mago.

- ¡Ah! Si, claro. Él y sus amigos, Weasley, Lomgbottom y Dean harán la prueba. Yo mismo seré uno de los que los supervisare. Creo que Potter no va a tener muchas dificultades después de derrotar a Voldemort.

“Otra vez el nombre Voldemort, ¿quién habrá sido? Será alguien de algún equipo de fútbol que jugará bien, y que fue derrotado por un tal Potter”.

Siguieron hablando por la calle aproximadamente por cinco minutos. El niño los seguía con mayor interés sigilosamente, escuchando todo lo que podía, aún sin entender alguna palabra.
Se detuvieron en una puerta ancha y con el 353. El primer mago saco la varita y empezó a pronunciar hechizos que el chico no entendía.

- Vamos- dijo el mago cuando abrieron la puerta.

-Espera Félix, nos olvidamos de algo- comentó Art.

- ¿Qué? ¡Ah! Claro.- recordó el hombre supuestamente llamado Félix.

Ambos magos se dieron vuelta entorno a donde se encontraba el niño.

- ¡Lumos! – dijeron al unísono.

La oscuridad dejo de ser oscuridad para ser un lugar lleno de luz. El niño quedó expuesto a los dos magos sin saber que hacer y sorprendido por como esas personas habían manejado la varita. Ambos empezaron a reírse.

- ¿Qué hacemos con él? – inquirió Félix.

- Creo que será mejor que no recuerde nada – respondió Art.

- Bueno, pues entonces…. ¡Obliviate!